Erase una vez un niño que nació con los huesos de goma y la piel de caucho.La gente envidiaba su elasticidad y habilidad para doblarse. Pero él solo deseaba caerse y romperse una pierna para que sus amiguitos le firmasen en la escayola. He ahí su tristeza.
1 comentario:
si le pica la nariz, se rasca con los pies.
yo tambien, ejem
;)
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